sábado, 9 de mayo de 2009

Capitulo 5

Anahí point of view.

Jamás había encontrado a alguien como Edward hasta el momento. Él era lo más cercano a la familia que jamás había tenido. Si tan sólo supiera quien me había convertido en esto.
El puente que se había establecido entre ambos se debía en gran parte al hecho de poder leer su mente y él la mía. Los momentos en que estábamos hablando y se veía como perdido siempre aparecía el mismo nombre: Bella. ¿Quién sería ella y por qué le causaba tanto tormento?
Si tan sólo pudiera hacerlo sentir mejor... a mi lado. NO!!! No podía permitirme pensar en eso, no sabía cuanto tiempo más lo tendría a mi lado. No podría soportar no verlo, sentirlo a mi lado constantemente.
Esa idea no podía cruzarse por mi cabeza y... mi corazón, JAMÁS!
Me dedique a mirar la puesta del Sol en el Océano y me consolé con la idea de que siempre podría tener tardes como esta, hermosas, trémulas aunque ellas no fueran Edward.
Ahí se acercaba él, mejor pensaba en otras cosas, no se podía enterar. Cuando estuvo lo suficientemente cerca lo miré y le sonreí.
Te estuve esperando... y no sabes cuanto.

Edward point of view.

Tomé el móvil y marque el número de Alice, era la primera vez que hablaba con ella desde que nos separamos.
-Hola Alice-
-Hola Edward, hermano. No sabes como te extraño.
-¿Cómo han estado Jasper y tú? ¿Has sabido algo de la familia?
-Nosotros estamos muy bien, hemos estado averiguando sobre mi pasado. Más adelante te contaré bien en cuanto tenga datos seguros. Carlisle y Esme estuvieron de visitas la semana anterior, me dijeron que a lo mejor te visitarían. No lo harán por el momento. Rosalie y Emmet están haciendo un tour por el mundo- de repente su voz cambió, ahora era inquisitiva –Por cierto, ¿Quién es esa morena con la que estas viviendo?
Cierto Alice debería haber visto a Anahí en sus visiones.
-Su nombre es Anahí y es una de nosotros. La estoy ayudando a ser vegetariana-
Pude oír la risa de Alice.
-Edward el samaritano-
-No eres graciosa-le dije tentado.
-¿Hay algo más que quieras saber hermanito?-
De pronto Bella estuvo presente an mi mente, tan real como si estuviera a mi lado.
La voz de Alice interrumpió mis pensamientos.
-Se que estas pensando en Bella. Yo también la extraño, no como tú por supuesto. Tú sabes que jamás estuve de acuerdo con esto y creo que deberíamos volver-
-No Alice! Sólo estando lejas de ella estoy seguro que estará a salvo- traté de contenerme pero no pude evitar preguntarle-¿Has visto algo de ella? ¿Esta bien?-
-No he podido ver mucho-
-¿Por qué? ¿Le ha sucedido algo?-
-No... Presumo que es porque pasa demasiado tiempo con... los licántropos-
No podía pensar en Bella con ese perro, pero... nada podía hacer. Ella estaría bien.
-Gracias hermana. Trataré de llamarte más seguido-
-Cuídate Edward. No hagas nada estúpido-
-Lo haré-
Dejé el móvil sobre la mesa y miré hacia la playa. El Sol se estaba poniendo. Divisé a Anahí y me dirigí donde ella.

martes, 14 de abril de 2009

Capitulo 4

-Oh, vivo...- Su mirada era irónica, aunque muy en el fondo podía verse que escondía mucho dolor. De seguro esto no había sido fácil para ella.
Tienes razón, no es fácil. Me ha costado mucho abandonar los hábitos que adquirí siendo una neófita. Es más no creo que sea probable que algún vampiro vivo lo haga.
Me sobresalté, no estaba acostumbrado a esa falta de privacidad, ahora entendía la irritación que a veces embargaba a mis hermanos cuando los sorprendía pensando en algo demasiado privado.
Miré a la bella joven a los ojos, a esos rojos ojos. En ellos estaba contenida la esencia de su existencia. La sed, el dolor, la furia, el paso de los años. Todo reflejado en esa penetrante mirada.
Wow, si que eres profundo.
Odio esto, que poca privacidad
.
Jajaja, ahora sientes lo que tus hermanos, por cierto, ¿hermanos? Edward podrías contarme tu historia. Tengo todo el tiempo del mundo y la disposición de oirte.
No hay problema, retomaré mi historia en el punto en que la dejé.
-Como dije, gracias a Carlisle, mi padre; estoy aquí hoy. Carlisle es el vampiro con más autocontrol que jamás haya conocido. En mi familia no bebemos sangre humana. Anahí no es fácil, requiere mucho autocontrol y práctica. Aunque tampoco es imposible.-
-Para Edward, para ti es fácil. Tú no has vivido algunas de las cosas que yo he tenido que pasar. Nuestro pasado influye enormemente en nuestras acciones futuras-
-Anahí, tienes razón en lo que dices pero también tengo razón en esto: Poseemos fuerza de voluntad y está en ti hacerla valer. Justificarse por las matanzas que realizamos es algo cobarde. Si vas a matar, acéptalo y no busques justificarte.-
Eres muy duro.
Soy justo.
Si pudiera llorar, Edward, lloraría. Toda una eternidad buscando el llanto, aún a sabiendas de que huirá de mí en cuanto me le acerque.
-Anahí, escúchame- tomé su cara entre mis manos- Yo te ayudaré a contener tu sed. Te acompañaré y te cuidaré. Seré para ti lo que Carlisle fue para mí-
-Edward, he vagado tantos años buscando la felicidad. Este sólo instante vale por todos estos años de penurias. El saber que hay una sola persona que se preocupa por mí, me hace sentirme viva otra vez.-
No tienes nada que agradecer, ahora ven conmigo, iremos a mi hogar.
¿Tienes casa?
Si, en realidad es de mi madre, Esme, Carlisle se la obsequió hace algunos años.
Cada vez me sorprendes más Edward Cullen. No creas que he olvidado que la historia de tu familia aún no finaliza. Amigo, tendrás que contármela en el camino.
Sonreí a la maravillosa joven, su parecido con Bella era asombroso. Observarla me remontaba a la visión que Alice había tenido sobre Bella cuando recién nos conocíamos. Ambas reían abrazadas, aunque todo color en la piel de Bella había desaparecido y sus ojos se habían tornado del color de la sangre.

sábado, 21 de marzo de 2009

De cuantas maneras se puede destruir un corazón y esperar que siga latiendo. Parte 3

Debo salir de aquí.
-No temas, no te haré daño. Ya soy demasiado monstruoso-
-¿Cómo supiste lo que pensaba?-
-Es un poder que poseo, ¿Tú tienes alguna cualidad especial? Me refiero aparte de ser inmortal- Puse mi mejor sonrisa, esa que nunca fallaba y la miré a los ojos.
Ahora que la miraba detenidamente comencé a notar su parecido con Bella. Oh, Bella... ¿Cómo estarás mi sol?
Anahí no era tan blanca como ella, su piel poseía un color mate, propio de los indígenas sudamericanos. ¿Sería indígena? ¿Qué edad tendría?
Aparte de su parecido físico a Bella, sentía por ella el mismo sentido de protección que Bella me generaba.
Cuando volví a poner atención en ella, noté que me miraba de forma extraña. Lo más probable es que mientras yo seguía el hilo de mis pensamientos, mi mirada hubiese denotado alguna extraña expresión de tristeza.
-¿Quién es Bella?-
-¡¡¡¡¿Qué?!!!!- ¿Cómo podía saber lo que había pensado?
-Si, escuchaste bien. ¿Quién es Bella?, te oí mencionarla hace unos instantes-
-Yo nunca dije nada-
Si por supuesto, ahora me tratas de loca.
Yo jamás insinué nada.
¡¡¡Claro que sí!!! Tu mirada te delata extraño.
Lamento no haberme presentado antes. Mi nombre es Edward Cullen.
-Y te repito Anahí, no creo que estés loca. ¡Ah! Y por si no lo has notado tu también puedes leer mentes- Era la primera vez que me encontraba que poseía el mismo poder.
-No lo había hecho jamás con anterioridad, es algo completamente nuevo para mí. Pero cuando me acerco a ti es como si ese poder fluyera por todo mi ser-
Y no es tan malo.
Créeme después de un siglo se vuelve insoportable. Cuéntame más de tu historia, ¿Cómo fuiste convertida?
-La verdad es que no recuerdo nada de mi pasado, recuerdo la agonía que transformarme en “esto” me produjo y mi nuevo despertar al mundo, pero no recuerdo quien o por que fui convertida. Si mis cálculos no fallan, tengo 325 años vampiros-
- Wow, señorita mayor. ¿Alguna vez habías estado con otros vampiros?-
- No. Además los últimos 100 años he estado oculta, trato de cambiar mi dieta a una que no sea tan...-
- Te entiendo- La miré y me decidí a ayudarla, después de todo si Carlisle no hubiese estado ahí cuando lo necesité todo hubiese sido diferente.
- Noté que mis ojos te llamaban la atención-
-Así es, ¿Es que acaso utilizas lentillas?-
- No. Yo pasé por lo mismo que tú hace algún tiempo, pero mi padre...- su exclamación me interrumpió.
-¡¡¡Padre!!!, ¿Qué acaso tu mismo padre, te convirtió en lo que eres?- su mirada era de horror.
- No, Carlisle no es mi padre consanguíneo pero si es quien me convirtió. Yo estaba enfermo de gripe española y estaba muriendo. Fue muy difícil para él hacerlo, aunque gracias a él estoy vivo- Nos miramos, ambos sabíamos que esto no era vida, pero era algo.

sábado, 28 de febrero de 2009

De cuantas maneras se puede destruir un corazón y esperar que siga latiendo. Parte 2

Había comenzado el segundo mes de mi estadía en Isla Esme.
Recordaba a Bella a cada segundo, aunque mis ansias de volver se habían aplacado un poco, no así mi sed. Desde que me encontraba en Isla Esme mi sed había aumentado, debía salir de caza con mayor frecuencia y abandonaba la isla al menos un par de veces por semana para cazar fuera de ella.
Fue en una de esas partidas de caza donde sentí una voz que sobresalió sobre las demás “El vampiro de ojos amarillos esta aquí otra vez”. Sorprendido busqué el origen de la voz. Me sentía acechado y a la vez preocupado, las únicas vampiresas que conocía en Brasil era Senna y Zafrina pero ellas vivían internadas en la selva.
Mientras intentaba encontrar a la dueña de la voz que me había quitado la poca paz que me quedaba sin Bella, decidí alejarme de la cuidad y ver si la vampiresa me seguía. Estaba en un lugar concurrido y con el sol en su cenit no era el momento para mostrarse.
Comencé a correr en dirección a un pequeño bosquecillo que había a un par de kilómetros de los suburbios. Cuando llegué allí, esperé a ver si oía de nuevo la misteriosa voz que había hablado de mí. No pasaron dos minutos y había vuelto a oírla, esta vez decía: “Contrólate, contrólate”. Comencé a escrutar cada uno de los rostros de la veintena de personas que se encontraban en las lindes del pequeño hijo de la selva. Sólo una joven logró llamar mi atención, estaba cubierta de pies a cabeza, al igual que yo, aunque ella poseía lentes ahumados. Parecía descompuesta, rápidamente corrí hacia ella y la alcé; antes de que ella pudiera reaccionar nos encontrábamos cubiertos y protegidos por el follaje. Una vez a cubierto la dejé en el suelo y escrutando su mente dije:
-Dime quién eres-
La joven pareció hacer oídos sordos a mi pregunta, tanto como con su boca, como con su mente. Sin embargo, comenzó a quitarse lentamente los lentes, luego la gorra y un par de remeras, finalmente quedó en musculosa y jeans. Su piel era de mate pálido, tenía cabello largo, ondulado y castaño. Era sumamente bella, sólo una cosa opacaba su bello rostro: Sus ojos, dos ojos grandes y redondos ojos pero de un rojo intenso y profundo.
-¿Quién eres tú, extranjero? Mi nombre es Anahí-
-Deseo saber tu verdadero nombre- respondí, en su cabeza había resonado otro bastante diferente.
-No miento- fue su respuesta, para mi sorpresa, era verdad.



De cuantas maneras se puede destruir un corazón y esperar que siga latiendo

Mientras me alejaba, aún podía ver la cara de Bella y sentir su llanto. Había sido demasiado sencillo el separarme de ella, es que todavía no me creía capaz de amarla tanto o más como ella a mí.
Sentí el deseo repentino de volver por ella y decirle que todo era mentira, que huyéramos los dos solos... Pero luego recordé a mi familia y a todo lo que la había sometido por mis ideas.
Al llegar a la casa Carlisle y Esme me esperaban, Rosalie y Emmet ya habían partido al igual que Jasper y Alice. Se que estaba muy enojada conmigo por no permitirle despedirse de Bella, pero ya encontraría la manera de disculparme.
- Esta bien hijo, sabes que lo que haces es lo mejor para todos, en especial para Bella – me dijo Carlisle.
Carlisle tan bueno, él siempre nos apoyaba en todo, pero aún así podía ver en sus pensamientos su preocupación hacia mi.
No había pasado un día separado de Bella y ya me veía distinto, era como que esa especie de luz que siempre me alumbraba se hubiese apagado.
Esme y Carlisle irían a Alaska, yo me dirigiría hacia Sudamérica a Isla Esme.
- Adiós hijo, cuídate – me dijo Esme y me miró como una madre a su pequeño niño.
- Lo haré – le respondí.

Me tomó un día y medio llegar, si algo no podía negar es que era muy veloz. Una vez instalado me dediqué por lo menos durante un mes a recordar cada uno de los momentos que había pasado con Bella, momentos robados a la eternidad.
Me sentía como un ciego que ha vuelto a ver y luego pierde la vista.


Twilight's Stories: Nuestra propia versión de la historia

Twilight's Stories está dedicado a mostrar lo que hemos imaginado sobre la recientemente denominada "Saga del Crepúsculo".

Como esperamos hayan deducido, Twilight's Stories está dedicado a los fics que hemos creado con la increíble historia de Stephenie Meyer.

Muy pronto colocaremos el primer fic realizado. El tema del mismo será: La desapirición de Edward en Luna Nueva, lo que creemos que podría haber sucedido mientras él estuvo ausente de la vida de Bella.


Ah, me olvidaba de poner que cada mes colocaremos un fic premiado,escrito por alguno de nuestros visitantes. Puedes enviar el fic a amo.twilight18@gmail.com; su el fic está colocado en un fotolog o algo así, envíanos por mail la dirección y tu nombre!!!!!!!!!